Sunday, August 29, 2021

Rain - Lluvia

 

Rain

On sad Autumn days, the rain whispers to me. Every drop confidences me. She tells me where she has been in ancient times and tells me where she will be in a million years. Some, the smallest, are singsong, and sneak into the nests that time weaves with the lives of melancholic souls. Others, almost gigantic, pass by, giving themselves importance, although later they return and caress you. In the end, some return to the oceans. Others are dropped on the ground and when they reach the depths they agree with the gnomes and the beings of the forest their future.

 

Lluvia

En los tristes días del otoño, la lluvia me susurra. Cada gota me hace confidencias. Me dice donde ha estado en épocas remotas y me confiesa donde estará dentro de un millón de años. Algunas, las más pequeñas, son cantarinas, y se cuelan entre los nidos que entreteje el tiempo con las vidas de las almas melancólicas. Otras, casi gigantes, pasan de largo, dándose importancia, aunque luego vuelven y te acarician. Al final, unas vuelven a los océanos. Otras se dejan caer en la tierra y cuando llegan a las profundidades pactan con los gnomos y los seres del bosque su futuro.  

Tuesday, August 24, 2021

The Bridge - El puente

The Bridge

A peaceful autumn day. The sweet colors of the withered leaves of the trees on the ground accompanied us as we strolled down the hill. They were trees acclimated to the unrepentant lunar solitude that, together with the brilliant image of the Earth's surface, reminded us of our childhood on Earth. We had recently purchased a building in the complex located on the Sea of ​​Serenity. The complex had been baptized with the name of "The Bridge", referring to the flexible tubular structure that linked the Earth with the Moon. We had used the bridge very often to travel to Earth, and access to it was an imposing transparent hemisphere sealed from the outside.

That morning, after our walk, we decided to visit the hemisphere, within which all kinds of businesses proliferated, to try to buy some luminous flying gadgets for our house. The surprise was unspeakable. We barely had time to close the gates, outer space became a solid, impenetrable mass and the possibility of movement disappeared except in that miraculous tunnel and inside the hemisphere. It wasn't that something had invaded the space. It was the very space that had become solid and black. The black color was all that could be seen of the surface of the dome covered with that mass of space.

 

El puente

Un apacible día de otoño. Los dulces colores de las hojas marchitas de los árboles sobre el suelo nos acompañaban mientras paseábamos colina abajo. Eran unos árboles aclimatados a la impenitente soledad lunar que, junto a la imagen brillante de la superficie terrestre nos hacía recordar nuestra infancia en la Tierra. Habíamos comprado recientemente un edificio en el complejo situado en el Mar de la Serenidad. El complejo se había bautizado con el nombre de “El puente”, haciendo referencia a la estructura tubular flexible que unía la Tierra con la Luna. Habíamos utilizado muy a menudo el puente para viajar a la Tierra, y el acceso al mismo era una imponente semiesfera transparente sellada del exterior.

Aquella mañana, después de nuestro paseo, se nos ocurrió visitar la semiesfera, dentro de la cual proliferaban todo tipo de negocios, para tratar de comprar unos artilugios voladores luminosos para nuestra casa. La sorpresa fue inenarrable. Apenas tuvimos tiempo de cerrar las compuertas, el espacio exterior se convirtió en una masa sólida, impenetrable y la posibilidad de movimiento desapareció excepto en aquel milagroso túnel y en el interior de la semiesfera. No se trataba de que algo hubiera invadido el espacio. Era el espacio mismo que se había transformado en aquello sólido y negro. El color negro era lo único que se podía ver de la superficie de la cúpula cubierta con aquella masa de espacio.

Thursday, August 19, 2021

Mohammad Shaban

Mohammad Shaban

He only has the imagination, the memory of what his eyes saw before he lost them. Mohammad is a handsome boy. His cheeks declare his love for life. He has not lost his smile, nor has he lost the illusion for so many things that he has to live in the future, his future. Someday somewhere, someone will return his sight and he, grateful, will continue to smile at the world and forgive, if forgiveness is possible in this difficult world.

From @AndredeVegte6

https://twitter.com/OnlinePalEng/status/1427002637384404995/photo/1

 

Mohammad Shaban

Solo le queda la imaginación, el recuerdo que lo que sus ojos veían antes de perderlos. Mohammad es un niño guapo. Sus mejillas declaran su amor por la vida. No ha perdido la sonrisa, ni ha perdido la ilusión por tantas cosas que tiene que vivir. Algún día en algún lugar, alguien le devolverá la vista y él, agradecido, seguirá sonriendo al mundo y perdonando, si es que en este mundo difícil cabe el perdón.

De @AndredeVegte6

https://twitter.com/OnlinePalEng/status/1427002637384404995/photo/1

Saturday, August 7, 2021

Motherhood - Maternidad

Motherhood

We were crossing Sherwood Forest when Marian, my wife, went into labor. We were on our way to Edwinstowe to join William I's army. The dark night made it impossible to tell how close we were to Edwinstowe.

Marian, in severe pain, leaned against the base of a tree. I, with the help of a torch, tried to help her give birth. After an interminable moment, something detached itself from her body. It was a kind of shiny oval stone. Stunned, I didn't know how to explain it to Marian. She stared at me and looked at what she hoped was a newborn. Her features transformed and she began to scream and cry bitterly. Then she lost her mind. She picked up the thing and caressed it, wrapped it in a blanket and kissed it.

Dawn surprised us exhausted. Marian had not slept. Next to her face rested that shiny stone. As if she were a baby, she sang and kissed it, moving her hand as if something invisible was caressing her. I decided we couldn't get to Edwinstowe so we stayed there. But not for long. During the next night, such was Marian's love for the stone, that the stone, in response to her songs began to glow with multicolored hues and an almost inaudible melody could be heard caressing the soul. Then Marian, after clasping the stone in her hands, died. Then, the stone darkened and began to shrink in size until it disappeared.

 

Maternidad

Cruzabamos el bosque de Sherwood cuando Marian, mi esposa, se puso de parto. Nos dirigíamos a Edwinstowe para unirme al ejército de Guillermo I. La noche cerrada no permitía saber lo próximos que estábamos de Edwinstowe.

Marian, con fuertes dolores, se reclinó en la base de un árbol. Yo, con la ayuda de una antorcha, trataba de ayudarle a dar a luz. Después de un instante interminable, algo se desprendió de su cuerpo. Se trataba de una especie de piedra ovalada y brillante. Atónito, no sabía cómo explicárselo a Marian. Ella me miró fijamente y dirigió la vista a lo que esperaba que fuera un recién nacido. Sus facciones se transformaron y empezó a gritar y a llorar amargamente. Entonces, perdió la razón. Cogió aquella cosa y la acarició, la envolvió con una mantita y la besó.

El alba nos sorprendió exhaustos. Marian no había dormido. Junto a su rostro descansaba aquella piedra brillante. Como si fuera un bebé, ella le cantaba y besaba, moviendo su mano como si algo invisible la acariciara. Decidí que no podíamos llegar a Edwinstowe así que nos quedamos allí. Pero no por mucho tiempo. Durante la noche siguiente, era tal el amor que Marian profesaba a la piedra, que ésta, en respuesta a sus canciones empezó a brillar con tonos multicolores y una casi inaudible melodía se escuchaba acariciando el alma. Luego, Marian, después de estrechar entre sus manos aquella piedra, murió. A continuación, la piedra se oscureció y empezó a reducir su tamaño hasta desaparecer.

Sunday, August 1, 2021

Purgatory and Nothingness

 Purgatory and Nothingness

Two soulmates were planning how to escape together from purgatory. They observed that every day during the change of guard of the couple formed by the angel and the devil who guarded the great exit doors, that the doors, awake almost twenty-four hours, fell asleep for a minute, until the new pair of guards appeared. They dressed in their best clothes and with the greatest stealth they crossed the space that separated purgatory from nothingness. When they fell into nothingness they did not know what to do and tried to return to purgatory. Impossible! The doors no longer existed. Then the nothingness asked them about the feelings that united them. One of the souls blushed. Nothingness got as close as it could to the other soul. It gave off so much light that nothing dared to touch it, and nothingness was surprised that a soul that had just escaped from purgatory was so extraordinarily bright. The verb escape is not a kind word and leaves a trail of questions and sadness. So nothingness went its way. The nothingness was the owner of the space, so as the nothingness moved away, the space was consuming and narrowing, narrowing, so that the souls could no longer be there. And suddenly they were expelled and took refuge in the little bodies of two newborns, who in time would be the happiest lovers of eternity.

El purgatorio y la nada

Dos almas gemelas estuvieron planeando cómo escapar juntas del purgatorio. Observaron que durante el relevo de guardia de la pareja formada por el ángel y el demonio que custodiaban las grandes puertas de salida, que las puertas, despiertas casi las veinticuatro horas, se dormían durante un minuto, hasta que aparecía la nueva pareja de guardias. Se vistieron con sus mejores ropas y con el mayor sigilo atravesaron el espacio que separaba el purgatorio de la nada. Cuando cayeron en la nada no sabían qué hacer y trataron de volver al purgatorio. ¡Imposible! Las puertas ya no existían. Entonces la nada les preguntó por los sentimientos que las unían. Una de las almas se ruborizó. La nada se acercó todo lo que pudo a la otra alma. Despedía tanta luz que la nada no se atrevía a tocarla, y se extrañó que de que un alma que acaba de escapar del purgatorio fuera tan extraordinariamente brillante. El verbo escapar no es  no es una palabra amable y deja un rastro de preguntas y de tristeza. Así que la nada siguió su camino. La nada era la dueña del espacio, así que medida que la nada se alejaba, el espacio se fue consumiendo y estrechándose, estrechándose, de modo que ya no podían estar allí. Y de pronto se vieron expulsadas y se refugiaron en los cuerpecitos de dos recién nacidos, que con el tiempo serían los amantes más dichosos de la eternidad.