Se reunió con su jefe en una cafetería. Le entregó una carta
que sacó del bolso y se marchó. Su jefe leyó la carta y se dirigió al baño.
Al día siguiente, la policía se presentó para llevarla a
comisaría y someterla a interrogación. A su jefe lo habían encontrado muerto en
la cafetería, y en sus manos tenía una carta en la que se leía:
‘Estamos muy cerca del
final: 3X4≠12.’
Y claramente
se distinguía en la firma el nombre de Lorena.
San Frutos, el
inspector de policía le hizo la siguiente pregunta:
-¿Es suya esta firma?
Ella contestó
afirmativamente.
-¿Me puede decir qué
significa que tres por cuatro sea distinto de doce?
-Ernesto me envió una carta hace dos semana. En la
carta, acompañada por un plano, me decía que iba a dejar a su esposa para
casarse conmigo, y que en tres días (3), en el hotel marcado con una X sobre el
plano, nos veríamos en la habitación número 4. Yo tenía que facilitar un nombre falso (≠) en el hotel y debía estar
allí a las 12 del mediodía. Él terminaba su carta resumiendo todo con esa
fórmula.
En la carta que le entregué en la cafetería no hice más que repetir la fórmula, y con ella le quería indicar que
seguiríamos con el plan.
-¿Qué ocurrió después de que usted leyera la carta?
-Seguí sus instrucciones, y quien allí me estaba esperando en el hotel era
su esposa. Me dirigió una mirada despectiva y me dijo: ‘Querida furcia, nunca
pensé que fueras tan vulgar. Liarte con un depravado ha sido la peor cosa que
has hecho en tu vida y la última, porque te juro que voy a acabar con los dos.’
Él me llamó desesperado para explicarme que su esposa había visto la carta sin
que él se diera cuenta de ello, y perpetró un accidente, haciendo que Ernesto se
cayera por las escaleras sin mayores consecuencias, pero evitando así que se
reuniera conmigo.
-¿Conserva esa carta?
-No, me deshice de ella.
-Está bien. Puede marcharse. Pero necesito que esté disponible por si la
tenemos que llamarla.
A Ernesto le encontraron en uno de sus bolsillos una pequeña libreta que
parecía ser un diario. Anotaciones de números de teléfono, palabras sueltas que
parecían responder a un sistema de claves y referencias a contactos, entre otras cosas. Una anotación
le llamó la atención al inspector. En el día en que murió, había escrito 3X4≠12
y a continuación un número de teléfono.
La misma noche del día en que murió Ernesto encontraron a su mujer apuñalada
en su casa. Obviamente el sospechoso no podía ser su marido ya que había muerto
horas antes. Según el forense, fue asesinada esa misma noche y al menos
tres personas habían participado en el asesinato, entre otros indicios debido a
la disposición de las heridas y a las distintas marcas dejadas por cada una de
las armas empleadas en el crimen.
El inspector volvió a citar a Lorena en comisaría.
-Le informo de la muerte de la esposa de su amante.
Lorena se sorprendió pero no dijo nada.
-Sabemos que usted sabe que en la noche del día en que murió
su amante, a las doce, fue asesinada por tres individuos. Lo que hizo usted al
entregarle la carta a su amante, fue darle las instrucciones para llevar a cabo
el asesinato de su esposa. Lo que usted no sabía era que ella ya lo había
envenenado, justo antes de que quedara con usted en la cafetería. Un veneno que
surte efecto horas después de ser ingerido. Su amante no sabía que iba a morir
horas más tarde, y su mujer no sabía que iba a ser asesinada esa misma noche.
-El número de teléfono que Ernesto había anotado en su agenda
era el del grupo de asesinos que acabaron con la vida de su esposa y que usted
previamente le había facilitado a su amante.
-En realidad la clave de la fórmula no tiene nada que ver con
la que usted confesó en su momento. Lo que usted hizo al entregarle la carta a
su amante fue informarle del plan para deshacerse de su esposa. Tres hombres
(3) se cruzarán (X) con ella cuando vuelva a casa en el cuarto piso (4) y la
asesinarán (≠) en el
número doce (12) de su calle.
-En cuanto a su encuentro con la mujer de su amante, fue
usted la que la llamó para quedar con ella y para que hubiera testigos de su
amenaza, por si les ocurría algo.
La acuso formalmente del asesinato de la esposa de su
amante.
Lorena agachó la cabeza y no dijo nada.
No comments:
Post a Comment
minutorelatos.blogspot.com